Hoy más que nunca requerimos de una
alimentación más saludable y que contenga los nutrientes necesarios para todos
los procesos metabólicos y bioquímicos para un perfecto y equilibrado
funcionamiento de todos nuestros sistemas.
Los frutos secos se llaman así porque
contienen sólo un 50% de agua en su composición. Estos frutos pueden ser de
cáscara dura, como la nuez, las almendras, los cacahuates, los pistachos, los
piñones, o bien deshidratados, como la uva pasa, los dátiles, la ciruela pasa,
los higos, los orejones, los arándanos.
La gran mayoría de los frutos secos
contienen la vitamina “A”, “B”, “C”, ”E”, y son ricos en ácidos grasos
insaturados, como el linoleico, necesarios para el desarrollo y mantenimiento del
sistema nervioso, así como minerales tales como el calcio, cinc, magnesio,
fósforo, manganeso, cobre, contienen también fibra y una de las bondades es que
se metabolizan con facilidad. La mayoría de ellos por sus ácidos grasos
monoinsaturados y poliinsaturados disminuyen el colesterol malo (LDL), y
aumentan el colesterol bueno (HDL).
El sistema nervioso requiere estar bien
nutrido, y para ello son altamente beneficiosos los frutos secos como la
avellana, que contiene vitamina “B” y magnesio, la nuez de Brasil que además de
ser rica en vitamina “E”, aporta minerales como el fosfato, el magnesio, el
calcio y el hierro. La nuez de Brasil
son ricas en proteína (14.3%) y en vitamina “B1”, superando a la leche, la
carne y los huevos. Es altamente recomendado en trastornos nerviosos,
irritabilidad, depresión, pérdida de memoria y falta de concentración.
Otro fruto seco es la almendra, porque su
proteína también es de fácil asimilación y muy completa en cuanto a los
aminoácidos esenciales. Más de la mitad
de su peso está formado por grasas destacando el ácido linoleico. También son
ricas en vitaminas “B1” y “B6” y sobre todo en vitamina “E”; además es rica en calcio y fósforo. El
calcio es necesario para el buen funcionamiento del sistema nervioso. En Sonora por ejemplo, donde se tiene una
dieta hiper ácida, por el alto consumo de azúcares refinados, grasas y harinas
refinadas, el cuerpo para equilibrar el PH obtiene el calcio de donde puede, y
lo más frecuente es que lo tome de los huesos, por eso hay tanto problema de
osteoporosis.
Cuando los bebes rechazan la lactosa,
puede sustituirse la leche por una “lechada de almendras”, que se obtiene
dejando en remojo de 30 a 40 almendras, y a la mañana siguiente se les retira
la piel y se licuan con agua. Pero la alimentación de los lactantes no debe
consistir exclusivamente en esta “lechada”, sino que puede enriquecerse con
otros alimentos como la leche de soya.
También es recomendable para las mujeres
embarazadas y lactando, que pueden ingerir de 5 a 6 almendras diarias por el
aporte de calcio. Como la almendra es de
reacción alcalina, favorece la retención de calcio, contario a la carne, con la
que se pierde calcio.
La nuez, es rica en grasas, como el acido
linoleico, que reduce el colesterol malo, e interviene en la formación de
tejidos nerviosos y producción de anticuerpos. También tiene acido linolénico,
que pertenece a los omegas 3, por lo que
reduce el colesterol malo y triglicéridos. Contiene vitaminas “B1”, “B2”, “B3”
y “B6”, ésta última interviene en el buen funcionamiento del cerebro y en la
producción de glóbulos rojos. Inclusive
la nuez tiene la forma parecida al cerebro porque favorece la nutrición de
éste. También es rica en fósforo,
potasio, hierro manganeso. La nuez es de
las mejores fuentes de oligoelementos.
Por su riqueza en ácidos grasos, constituye la fuente primaria de
energía para las células del corazón. Comer 3 ó 4 nueves al día es altamente
nutritivo. Por su escaso contenido de hidratos de carbono y su alto poder
nutritivo las nueces son uno de los alimentos mejor digeridos por los
diabéticos.
Otro gran alimento es la uva pasa, muy
ricas en hierro potasio y fibra. También contiene las vitaminas del complejo
B. Además es laxante y ayuda en
problemas de estreñimiento, al igual que la ciruela pasa.
El pistache es otro fruto seco que
contiene gran riqueza en hierro y cobre se recomienda en problemas de anemia.
El dátil es una de las frutas de mayor
riqueza energética, tiene glucosa y fructosa. Vitaminas del complejo B, que
facilitan el aprovechamiento de los azúcares.
Los dátiles aportan potasio, hierro, magnesio, fosforo y calcio. También
tiene oligoelementos como el cobre, manganeso y cinc. También tiene fibra que
favorece el movimiento peristáltico del intestino.
Así, estos frutos secos, en pequeñas porciones
pueden consumirse tres horas después del desayuno, y a media mañana y serán de
gran beneficio nutricional.
Amparo Verdugo Palacios
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