Una planta tan
común, como la sábila (aloe vera), es originaria de África, y se dá en climas
cálidos como el nuestro, tiene enormes cualidades curativas, conocidas desde
tiempos inmemorables, y hasta nuestros días.
La palabra se deriva del árabe alloeh, que significa “sustancia amarga y
brillante”.
Se puede usar de muchas formas, como jugo,
crema, en shampoos, directamente sobre la piel sobre la piel, como te, como gel, y otras más.
En la antigüedad
se utilizaba para sanar heridas, picaduras de insectos, estreñimiento, digestión.
La sábila contiene
desde vitaminas, aminoácidos (licina, ácido fólico, valina, cobre, fenilanina),
minerales (manganeso, zinc, cobre, calcio, hierro, magnesio, potasio, sodio),
vitaminas (B1, B2, B6, B12, A, B), enzimas (aminalasa, catalasa, lipasa,
fosfatasa, oxodasa), ácido gamma-linoleico, siendo su principio activo el aloe.
Estos elementos le
proporcionan a la planta cualidades analgésicas, digestivas, antibióticas,
cicatrizantes, desinflamantes.
Es una planta que
requiere el mínimo cuidado, muy poco agua (de preferencia regarla dos veces a
la semana), que no le de directamente el sol, y que la tierra aledaña se
encuentre oxigenada (suelta) para que las raíces tengan un poco de profundidad,
pero además para su reproducción, porque la rama que llega al suelo
inmediatamente produce raíz y se convierte en una nueva planta.
Se utiliza
principalmente las hojas de la planta (la pulpa) que combinada con un limón con
todo y cáscara, y un poco de pepino con cáscara, licuada con un vaso de agua,
en ayunas, es de gran auxilio para la cicatrización de úlceras gástricas, por
los beneficios cicatrizantes, entre otros, que contiene la sábila.
También su pulpa puede
hacerse jugo, en un extractor, que combinado con agua, y un poco de miel,
ayudará enormemente al proceso digestivo, por las enzimas que contiene, como
cuanto por sus propiedades antibacteriales, por lo que es de enorme auxilio en
problemas de colitis, gastritis, diarrea, enterocolitis, estreñimiento, úlceras
gástricas, cálculos renales, diabetes, artritis reumatoide.
En la belleza la
aloe vera es utilizada como regenerador celular, también puede ser aplicada en
la piel, elaborándose una crema, en la que se mezclarán 150 gotas de tintura
básica de sábila, y 150 gotas de tintura de caléndula en 300 gramos de crema
humectante (lubriderm), y una vez incorporados todos los ingredientes tendremos
una crema que puede ser utilizada como mascarilla, en quemaduras solares o de
cualquiera otra, en problemas de acné, en picaduras de insectos, manchas de la
piel, dermatitis, pie de atleta, raspones, y otras.
Con el embarazo se
forman a veces estrías en senos y abdomen, por lo que la sábila en crema
aplicada como masaje, de preferencia uno por la mañana y otro por la noche
hidrata la piel y ayuda a evitarlas.
La tintura de
sábila se prepara licuando aproximadamente 700 gramos de hojas, y a ese licuado
se le añade 1,100 centímetros cúbicos de alcohol de 96º para consumo humano o
medicinal, y se le agregan 900 centímetros cúbicos de agua destilada,
incorporados éstos ingredientes se deja reposar por 20 días, agitándola cuando
menos 3 minutos cada día. Finalmente se
cuela en una tela de algodón, y después por un papel de filtro, y se almacena
en una botella de vidrio color ámbar y oscura, y puede durar esta tintura
algunos meses.
Por sus cualidades
antioxidantes, antivirales, puede ayudar a reforzar el sistema inmunológico, en
problemas desde resfríos hasta síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
También la sábila
nos puede energetizar y darnos mayor vitalidad, cuando la tomamos en jugo, de
preferencia hay que ingerirlo dentro de las cuatro horas siguientes a su
elaboración, porque pasado ese tiempo pierde sus propiedades (se oxida).
Ésta planta tan
común nos ayuda en problemas de salud, previniendo en algunos casos, y
corrigiendo en otros, por eso en tu casa no debe faltar ésta saludable planta.
AMPARO VERDUGO PALACIOS
217-3438